En dicha encuesta participaron un total de 224 directivos, de los que el 60% aseguró que, pese a la recesión global, seguían estando comprometidos con la incorporación de principios de RSC en sus estrategias empresariales.
Sin embargo, sólo el 30% de las empresas recogen datos con la frecuencia necesaria para poder adoptar medidas para resolver prácticas ineficaces en materias como la reducción de emisiones de CO2, consumo de agua y energía, la gestión de residuos, la sostenibilidad de la cadena de suministro, la normativa laboral, la composición de los productos y su ciclo de vida.