El principal objetivo es trasladar al cliente que la confianza pasa por mostrar y asegurarle un adecuado engranaje de los procesos y normas higiénico-sanitarias, así como los esfuerzos que la organización desempeña para proveer un entorno limpio y seguro.

 

Además, la digitalización de procesos, que ahora se torna imprescindible, implica cambios en la forma en que trabajan las personas, en los modelos de negocio y en las relaciones con clientes, con los proveedores y con el equipo interno y por ello durante esta primera jornada se expondrán diferentes tecnologías y aplicaciones pensadas para la reducción de costes y mejora en eficiencia, la mejora en la relación y la experiencia de los clientes, el aumento de la satisfacción de los equipos y una mayor eficacia en los procesos de seguridad e higiene frente a la COVID-19.