Hace unos meses el Govern de les Illes Balears y la Dirección General de Aviación Civil (del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana) nos pidieron que analizáramos qué efectos había tenido en el mercado el incremento de la subvención de los billetes aéreos a residentes en territorios no peninsulares. Está entre nuestras funciones orientar a la Administración para que la regulación se diseñe de forma que logre el máximo beneficio para el ciudadano. Y así lo hicimos…
La CNMC acaba de publicar un estudio (aquí la nota de prensa) sobre el impacto de las bonificaciones a residentes en los precios de los billetes aéreos en las rutas con las islas Canarias y Baleares. En él, analizamos los efectos del incremento de la bonificación en 2017 y 2018 y ponemos especial atención en estudiar el comportamiento de los precios en los viajes entre islas y con la Península.
Pero antes de seguir, señalamos dos cuestiones de enorme importancia. La primera es que la CNMC no cuestiona la subvención. El objetivo del estudio es comprobar si cumple con el efecto que pretende el legislador. Esto es, que sea lo más eficiente posible para el objetivo perseguido: facilitar la conectividad de los ciudadanos insulares con la Península y compensar la insularidad. En segundo lugar, aunque no por ello es menos importante: todo esto se plantea antes de la pandemia del COVID-19.