Los contadores de agua tendrán una vida útil de doce años, que podrá ser ampliada por periodos sucesivos de cinco años, si el gestor de los mismos demuestra que cumplen los criterios establecidos para su verificación, si bien los que ya estén en servicio y superen los 12 años deberán ser sustituidos en un plazo de cinco años. El Ministerio de Industria ha sacado esta semana una orden por la que se regula el control metrológico del Estado de determinados instrumentos de medida.