La desaceleración ha llegado al bolsillo de los españoles, a través de un menor consumo y un aumento del ahorro ante futuras curvas en la actividad. Los hogares elevaron su tasa de ahorro al 8,7% de su renta disponible durante el segundo trimestre de 2019, según datos del INE, dos puntos más que a finales de marzo. Este porcentaje supone así el mayor dato cosechado desde el segundo trimestre de 2013, hace seis años, cuando la economía española estaba en recesión. De hecho, el máximo histórico de la tasa de ahorro fue del 12,1% en pleno inicio de la crisis, en el segundo trimestre de 2009.