La provincia de Córdoba está de enhorabuena tras la puesta de largo -hace apenas 48 horas- del sello de garantía Naranjas del Valle del Guadalquivir, una iniciativa que persigue potenciar la ventas de un producto de calidad como es la naranja que se cultiva en el entorno de Palma del Río. Vaya por delante que el proyecto es de gran interés y que, bien gestionado, puede suponer un antes y un después en un sector como el de los cítricos, de gran trascendencia social, sobre todo por el abultado número de jornales que genera y porque es el sustento de muchas familias cordobesas. La asociación para la promoción de las naranjas del Valle del Guadalquivir está formada por 18 socios, de los que nueve de ellos son las empresas productoras y los otros nueve asociaciones como los dos Grupos de Desarrollo Rural de la zona (Medio Guadalquivir y Gran Vega de Sevilla), organizaciones agrarias como Asaja o empresas como Ecoenvases.