El Tribunal de Primera Instancia de la Unión Europea (UE) ha anulado las decisiones de la Comisión Europea, que impusieron reducciones drásticas de las cuotas de emisión de gases de efecto invernadero, correspondientes a Polonia y Estonia. Los jueces han considerado que "al imponer, con ocasión de su control del Plan Nacional de Asignación -PNA- (de esos países), un límite máximo para los derechos de emisión por asignar, la Comisión se excedió en las competencias que tiene conferidas". Los jueces europeos han recordado en su decisión de hoy que "sólo" el Estado miembro es competente tanto para elaborar el PNA, como para fijar los derechos que asignará y cómo los repartirá entre los operadores económicos del país. Contra las resoluciones del Tribunal de Primera Instancia, es posible interponer un recurso de casación, limitado a las cuestiones de Derecho, en un plazo de dos meses desde su notificación.