El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha solicitado al Gobierno canario la creación de un impuesto específico vinculado a la calidad del aire bajo el principio de que "quien contamine que pague". Además, reclama que la recaudación de dicha carga fiscal vaya a parar a quienes verdaderamente padezcan la contaminación, es decir, al propio municipio y que no se lo quede el Ejecutivo canario como sucede con el Impuesto sobre Grandes Superficies.