A través de esta distinción, se establecerán políticas de producto, precio,
distribución y comunicación adecuadas al segmento familiar y se certificará la
oferta global de los servicios turísticos, especialmente alojamientos y
restauración, así como la oferta integrada de los municipios.
Los servicios y recursos que se evaluarán serán los destinos, las
playas, los parques naturales y el patrimonio cultural, restaurantes,
actividades turísticas y servicios de alojamiento.