La consejería de Transición Ecológica tiene como objetivo principal esta anualidad centrar sus esfuerzos en la creación de un marco normativo que sirva de hoja de ruta cara la "transformación verde" y en el reto de conseguir la autosuficiencia energética de las administraciones públicas, sirviendo de ejemplo al resto de empresas.
En concreto, se pretende instalar placas solares y baterías en todos los edificios gestionados por las administraciones públicas, sean titularidad de ayuntamientos, cabildo, gobierno o estado, para lo que cuenta con una inversión de cerca de 450 millones de euros para llegar a una autosuficiencia del 80%, lo que supondría un ahorro en la factura energética de hasta 25 millones anuales.
Por otro lado, la consejería prevé la aprobación de tres leyes que considera fundamentales: la Ley Canaria de Cambio Climático y Transición Energética; la Ley de Biodiversidad y Recursos Naturales, y la Ley de Economía Circular.